Córdoba y Amatlán proyectan reducir el 95 por ciento de aguas negras (650 litros por segundo), con la puesta en marcha de una planta de tratamiento de aguas residuales, valuada en 500 millones de pesos, con apoyo del Fondo Nacional de Infraestructura del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos.
El director de Hidrosistema de Córdoba, José Joaquín Hernández Zavala, reconoció que a la fecha, trabajan con cinco “mini” plantas de tratamiento y dos que están en proceso de rehabilitación pero con ellas apenas tratan el cinco por ciento de las aguas residuales que generan los cordobeses.
Explicó que el Municipio dejará “encaminado” el proyecto a la próxima administración para su seguimiento.
Ayer, encabezados por el alcalde Tomás Ríos, se reunieron a puerta cerrada en sesión del órgano de gobierno de la paramunicipal, con el director de Energía y Medio Ambiente de Banobras, Carlos Andrés Puentes.
“Tenemos una deuda con el medio ambiente; como ciudad estamos muy rezagados y hemos estado tocando puertas y una que se abre es Banobras”.
Hablaron sobre conformar una asociación público privada, donde Banobras les facilite el 49 por ciento del costo total de la macro planta; es decir, cerca de 250 millones de pesos y el 51 por ciento restante lo paguen en el tiempo que dure el contrato.
Ana Laura de la Luz
El Mundo de Córdoba
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