Una de las pirámides de la zona arqueológica de Toxpan, la cual es un sitio sagrado.
Toxpan es una zona arqueológica ubicada en la ciudad de Córdoba,
Veracruz, mide cerca de diez hectáreas y alberga materiales de obsidiana
y 22 edificaciones prehispánicas de gran tamaño, entre éstas, un juego
de pelota.
Veracruz. - Este lugar olmeca que data del 300 d.C. será
sometido a un plan de manejo para que en 2017 se sume a la lista de
zonas arqueológicas abiertas al público.
“Abrir una zona
arqueológica a una visita indiscriminada tiene sus complejidades, hay
que garantizar la preservación del vestigio, entonces hay que (trabajar
para) garantizar la preservación de los bienes arqueológicos y comenzar a
hacer visitas programadas”, comentó Pedro Sánchez Nava, coordinador
Nacional de Arqueología del Instituto Nacional de Antropología e
Historia (INAH), durante una reunión con el comité técnico dedicado a
planear la preservación del sitio.
Al respecto, Israel Vázquez
Martínez, miembro del comité por parte de la Coordinación de Turismo de
Córdoba, explicó que “prácticamente toda la ciudad tiene vestigios
prehispánicos en sus alrededores, pero el punto importante, mismo que se
ha conservado de buena manera, es la zona arqueológica de Toxpan ya que
es el sitio sagrado con un total de nueve hectáreas y media donde
existen 22 estructuras prehispánicas”.
Estas construcciones,
añadió, son de diferentes tamaños, las más altas miden aproximadamente
16 metros de altura y destaca la presencia de un juego de pelota con
dimensiones de 75 metros de largo por 40 metros de ancho.
“Son
montículos de tierra con piedra y la zona se erigió entre dos ríos: Seco
y San Antonio de donde podían obtener tres elementos importantes: agua,
comida y material de construcción. El área sagrada está a menos de 2
kilómetros de distancia del centro histórico de la ciudad de Córdoba y
colinda al norte con el casco de la ex hacienda de San Francisco Toxpan y
al sur con la ex hacienda Santa Margarita”, explicó.
—¿A qué cultura perteneció el sitio?
—Se plantea que fue asentamiento de los olmecas aunque aún no es una
afirmación; comenta el arqueólogo encargado del sitio, Fernando Miranda,
que posiblemente después pudo haber una invasión nahua.
“La
fundación de Toxpan ocurrió hace más de 2000 años, cuando se inició la
construcción de las estructuras de la plaza central. Toxpan tuvo su
momento de apogeo en el periodo clásico (entre los años 300 y 600 d.
C.), cuando formó parte de la ruta de distribución e intercambio de la
obsidiana del Pico de Orizaba”, agregó.
Israel Vázquez Martínez
comentó que a pesar de que la zona pudo afectarse desde la época
colonial por la cercanía con el casco de la hacienda de San Francisco y
por la expansión de la mancha urbana, la mayor parte de los monumentos
del sitio ceremonial se han mantenido en un buen estado de conservación.
—¿Han hallado restos de obsidiana, cerámica y otros vestigios?
—Existen piezas halladas pero aún no hay trabajos de excavación tan
profundos, entonces hasta que se hagan, se podrían encontrar más
vestigios.
—¿Cuántas reuniones ha realizado el comité técnico?
—Aproximadamente cinco y el objetivo principal es la apertura del
sitio, pero respetando los lineamientos que indica el INAH, se está
creando el plan de manejo para iniciar con el trabajo de excavación. En
este grupo participa personal del INAH, de la Universidad Veracruzana y
del Ayuntamiento.
OBSIDIANA. Desde la fundación de Córdoba,
Toxpan fue un lugar de paso obligado por la cercanía con el Pico de
Orizaba, de donde se plantea que los antiguos pobladores explotaron
minas de obsidiana. “En esas minas se han encontrado piezas como puntas
flechas, puntas de lanza, cuchillos, navajas y anzuelos para pescar,
entonces todo esto es lo que ellos comercializaban e intercambiaban, por
eso fue una ruta de comercio importante”, precisó Vázquez Martínez.
Al respecto, el arqueólogo Jorge Ceja Acosta, de la Facultad de
Antropología de la Universidad Veracruzana, en su artículo de
investigación titulado Observaciones generales sobre la distribución de
obsidiana en el postclásico en el sitio San Francisco Toxpan. Apuntes
sobre algunas categorías analíticas y sus implicaciones, señala que la
zona “tiene un potencial enorme de estudio en el ámbito de los sistemas
de producción artesanal, ya sea a nivel doméstico o relacionado con un
grupo elite”
Sobre la distribución de obsidiana sugiere que
podría estar relacionada con un taller ubicado en una de las 22
estructuras, “lo cual querría decir que la talla de obsidiana sería
controlada por grupos de elite, esto en relación a la ubicación de la
estructura con el conjunto Este, parte norte (estructuras de mayor
tamaño y juego de pelota)”.
También precisa que encontraron desechos
de talla de obsidiana en una unidad habitacional, por lo que su uso
estaría relacionado a una práctica doméstica y no a los grupos elite.
En dicho estudio, el investigador indica que a nivel estratigráfico
observó la presencia de tres capas, de las cuales, en dos detectó
elementos prehispánicos. “La segunda (capa) es de color café y delimita
muy posiblemente la presencia del Clásico (300-1000 d.C.); por último se
observa una de color negro oscuro y en ella había materiales del
Posclásico (1000-1500 d.C.) revueltos con materiales Coloniales o del
Histórico reciente”.
Los primeros registros de Toxpan
En
el trabajo de investigación de Ceja Acosta, se especifica que el
arqueólogo Luis Heredia en su Relación de Sitios y Zonas Arqueológicos
del Estado de Veracruz (1998), aparece registrado como sitio Córdoba-San
Francisco Toxpan, “topónimo compuesto del nombre de un santo católico y
un locativo de origen náhuatl que significa literalmente Lugar de
conejos, y destaca:
“Así mismo, Heredia menciona que el C. Carlos
Betancourt, inspector de segunda de la Dirección de Estudios
arqueológicos y etnográficos” es quien reporta por primera vez el sitio
durante el año de 1917 con motivo de un viaje de exploración e
inspección que llevó a cabo en Veracruz”.
Fuente:
LA CRÓNICA DE HOY